Reseña de Jay Blair, “Salvaging Empire: Sovereignty, Natural Resources, and Environmental Science in the South Atlantic”

https://acontracorriente.chass.ncsu.edu/index.php/acontracorriente/article/view/2468

Comienzoesta reseña con el problema de nombrar las islas a las que James Blair nos acerca en su libro. Soy argentina,son las Malvinas; “las Malvinas son argentinas”.No obstante, me resisto a reproducir el impacto que este reclamo ha tenido, no solo en las islas, sino también en el territorio continental argentino. Las Malvinas-símbolo se proyectana través de “mapas-logo” que contienena las islas dentro del espacio nacional y miden la distancia desde Ushuaia, el Aconcagua, o las cataratas del Iguazú. En pueblos de cualquier latitud y tamaño, plazas y monumentos a los veteranos se erigen centrales como “monumentos-logo”.Estos mapas y plazas—conectadas al cuerpo de lanación argentina a través de carreteras-arterias—contribuyen a naturalizar desigualdades y violencias pues, no importa la diferenciaterritorial, las Malvinas-reclamoapelana la constante renovación de un sentido nacional común y unificador. Como fantasma de un pasado herido, las Malvinas-espectroaparecentantoen el Congreso de la Nación como en la evaluación de proyectos de infraestructuras, avalando visiones de futuro racializantesy neoextractivistasque justifican el sacrificio de algunos en nombre deuna soberanía que, como señalaría Carlos Masotta (2010), resulta siempre incompleta…

Leave a comment

Create a website or blog at WordPress.com

Up ↑